Las playas del litoral de Huelva, en contra de lo que se temía, han dejado atrás el fin de semana (puente festivo para los sevillanos por el Corpus) sin aglomeraciones.
Se trataba del primer fin de semana en el que el Gobierno permitía la movilidad entre provincias en Andalucía (Fase 3) y presuponía que la costa onubense registraría un masivo flujo de personas.
Y es cierto que ha habido público en las playas, pero sin aglomeraciones como las registradas en Barcelona, donde efectivos de la Guardia Urbana han tenido que intervenir para desalojar dos playas ante la masificación de personas, que en la mayoría de los casos ni respetaban las distancias de seguridad ni llevaban mascarillas.
Así, en Matalascañas, uno de los destinos favoritos para los sevillanos, las expectativas del Ayuntamiento de Almonte, que esperaba una población de 70.000 personas, no se ha cumplido.
¿Qué ha influido para que aquí no se haya registrado una mayor afluencia? Pues algunos piensan que la bajada de temperaturas y el desapacible viento que se ha registrado ha ahuyentado a muchos bañistas.
Otros apuntan a la concienciación ciudadana sobre la necesidad de evitar las concentraciones humanas incluso al aire libre.